Calcio
Elemento químico.
Su símbolo
es Ca y su número atómico es 20. En los organismos se encuentra como ion calcio
(Ca2+) o formando parte de otras moléculas.
Funciones del calcio
Es el mineral más común en el cuerpo humano. Sobre el 99% del calcio en
el cuerpo se encuentra en los huesos y los dientes, mientras el 1
% se encuentra en la sangre y tejidos blandos. El nivel de calcio
en sangre y fluidos alrededor de las células (fluido extracelular) tiene que
ser mantenido en un rango de concentración muy estrecho para un funcionamiento
fisiológico normal. Sus funciones son tan importantes en el cuerpo, que si
escasea, éste desmineralizará los huesos para mantener los niveles de calcio en
sangre. Por esto, su ingesta adecuada es importante para mantener un esqueleto
saludable.
Posee un papel como mediador de constricción y relajación de los vasos
sanguíneos (vasoconstricción y vasodilatación), transmisión del impulso
nervioso, contracción muscular y la secreción de hormonas
como la insulina. Las células que se excitan, como las del músculo esquelético
y células nerviosas, contiene canales de calcio en sus membranas
celulares que permiten cambiar rápidamente las concentraciones de calcio. Por
ejemplo, cuando una fibra de músculo recibe un impulso nervioso que estimula su
contracción, los canales de calcio se abren permitiendo que unos pocos iones de
calcio pasen a la célula. Estos iones se unen a proteínas activadoras dentro
de la célula, que liberan una avalancha de iones calcio de las vesículas de
almacenamiento dentro de las células. La unión del calcio a la proteína troponina-c
inicia una serie de pasos que hace que el músculo se contraiga. Y la unión del calcio
a la proteína calmodulina activa enzimas que desglosan el glucógeno
muscular que proporciona energía a la concentración muscular.
Igualmente el calcio es necesario para estabilizar a un número de
proteínas y enzimas, optimizando su función. Como se comentó al tratar de
la vitamina K, se requiere la unión de iones de calcio para la activación de siete
factores de coagulación dependientes de la vitamina K en la cascada de
coagulación.
Aunque ya se hizo referencia cuando hablamos de la vitamina D, las concentraciones
de calcio en la sangre y fluidos de alrededor de células están estrechamente
relacionadas para perseverar la función fisiológica normal. Cuando el calcio
de la sangre disminuye, las proteínas detectoras de calcio en las glándulas
paratiroideas mandan señales que resultan en la secreción de la hormona
paratiroidea PTH. Esta estimula la conversión de vitamina D a su forma
activa, calcitriol, en los riñones. El calcitriol aumenta la absorción de
calcio en el intestino delgado. El calcitriol y PTH estimulan la liberación del calcio del hueso
por activación de los osteoclastos y disminuyen la excreción (por orina) del
calcio por la reabsorción en los riñones. Cuando el calcio de la sangre aumenta
a sus niveles normales, las glándulas paratiroidesa dejan de segregar PTH y los
riñones empiezan a excretar cualquier exceso de calcio en la orina.
Finalmente, resumiendo, el calcio es importante para mantener un sistema
óseo saludable, especialmente durante la etapa de crecimiento, regula el ritmo
cardíaco, regula los procesos de coagulación de la sangre junto con la vitamina
K, ayuda a transmitir impulsos nerviosos, ayuda a activar varios complejos enzimáticos, regula la excitabilidad de los nervios y
músculos e interviene en la absorción de la vitamina B12.
Alimentación y calcio.
El calcio se encuentra en diferentes verduras como espinacas, col rizada,
acelga o brócoli. También se encuentra en legumbres como judías blancas,
garbanzos, lentejas y soja; en leche y derivados; y pescados como lenguado,
salmón y sardinas.
En el mercado, se pueden encontrar complementos alimenticios a base de calcio, entre los que recomendamos los siguientes:
Para cualquier duda, podéis dejarla en los comentarios y os ayudamos. ¡Un saludo!
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